óleo de arturo garcía fernández
LA MUERTE
I
La muerte es un espectro
que no tiene ojos
ni oídos
Es una cosa sin rostro
experta en relaciones
públicas
No se baña
pero canta en las lagunas
y usa tu nombre
Se sabe de memoria
todos los números
de teléfono
y le ordena a las momias
que nos den un besito
La muerte
antes de existir
no sabía que iría al cine
y a ti se parece
cuando te miras
en un espejo de sangre
cuando te quedas
sin brazos
y se te cae la cara
La muerte
es una autosugestión
crónica
es un problema psicológico
La muerte
es una alucinación colectiva
que se convirtió
en un suceso tan real
como un mordisco
La muerte
debería cambiar de oficio
debería volver
a su burdel de sombras
y que por favor
no me moleste
II
Si la muerte me sigue molestando
Pego un grito o llamo a mi mamá
Y si eso no basta le muestro mi calavera:
Así se bajaría de la nube
en que anda viajando gratis
Cuchicheando en los bares que es mi novia
Cuando se vuelve un travesti ganando
Reputación entre los juerguistas
Muertos de la borrachera
La muerte no existe y los muertos tampoco
Muéstrenme un muerto que exista y tampoco les creo
Ni a ustedes ni a los muertos
Todo está tan vivo como una roca
O como un aforismo
Si lo dudan pregúntenle a las esculturas
O a los paramecios
O a los enfermos
Que son vida a todo vapor
Las bolas de billar también saben del asunto
Y las cucarachas trepando un fémur están ilustradas al respecto
El concepto de muerte no se pudre
E ignoro el nombre del perro de Spinoza
Las cucarachas de Kant se le tomaban el vino
Y los muertos de Rilke se le tomaban la leche
Si tuviera una mandarina se la daría a un ángel
En 1999 descubrí que un ángel es
Una invasión electromagnética no geometrizable
Volvamos a la muerte
Pero para asustarla o para prestarle un libro
De Martin Heidegger
La muerte detesta el Bardo Todol
Porque lo que más ama es el Samsara
Lo que me diferencia de la muerte
Es que ella tiende una cama cuando yo me quito
La mortaja
III
La muerte viene de sus confines púrpuras
con sus castañuelas y sus disfraces
me entretiene con sus guiños
se enamora de mi boca
y me dice que le cante
Pobrecita muerte tan necesitada de mí
tan cargada de harapos
tan poco sexi
Cuando descienda a mis sótanos emocionales
le cantaré la tabla de la ley de mi vida
le colocaré un mortiño en alguna parte de su espectro
y si se pone muy romántica
le dedico un reggaetón
Si quiere que le enseñe a bailar
lo mejor es que se ponga un disfraz más cómodo
pero que no imite a mi novia
y que tampoco se alíe con mis amigos
Ella vendrá a mí con su sex appeal de anoréxica
y me dirá que tiene sed de infinito
y hambre de mí como siempre
Que se sacrifica
para que yo pase bien mientras
prepara mis corotos
La muy ilusa cree que soy un chico fácil
Ella cree que me va a convencer con sus trampas
Su soliloquio de huesos se lo tiro a los perros